Palacio de Miraflores, Caracas.- Gobernadores recién electos, ministerios en despliegue permanente y estructuras comunales: este es el trinomio que define la nueva estrategia de gestión territorial del Gobierno venezolano, buscando acercar las decisiones ejecutivas a los territorios. ¿Cómo funciona este modelo y qué desafíos enfrenta?
Bajo el cielo dorado de Cumaná, estado Sucre, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela fue recibido por el pueblo. Pancartas, consignas y cientos de banderas nacionales conformaban un escenario diverso, integrado por niños, adultos mayores, deportistas y pescadores. Contra todo protocolo presidencial, el 3 de junio de 2025, se implementó un nuevo estilo de gobierno que ahora recorre el territorio nacional.

En una especie de gira, el Mandatario visitó estados emblemáticos conquistados por los nuevos liderazgos de la Revolución Bolivariana, que asumieron las gobernaciones el pasado 25 de mayo. El objetivo: aprobar proyectos, dictar líneas de acción y desplegar a su tren ejecutivo. En paralelo, el país se halla inmerso en la transición hacia el Estado Comunal, impulsada por la Agenda Concreta de Acción (ACA), las 7 Transformaciones, las consultas populares nacionales y los mapas de los sueños.
¿Cómo funciona esta nueva estrategia y qué relación guarda con los intereses nacionales?
En cada estado visitado, el Mandatario nacional escuchó atentamente los discursos de juramentación de los gobernadores y gobernadoras, quienes, en su mayoría, resumieron sus planes de gestión para el período 2025-2029 e hicieron solicitudes vinculadas a proyectos públicos de gran envergadura. Ante ello, el Presidente ordenó la visita inmediata de los ministros para accionar en dichas tareas.
Así nació un movimiento ejecutivo que se acerca al territorio y que, además, considera las ACA, una fórmula que fortalece el «poder obediencial», del que habla Enrique Dussel en su libro 20 Tesis de Política. ¿Lo novedoso? Las ACA contienen agendas programáticas de políticas públicas, que reconocen a la comuna como el núcleo base de todo el sistema de planificación pública y popular.
En el estado Sucre fue la primera entidad en la que el Mandatario nacional solicitó la integración de las ACA a la gobernanza regional. En este sentido, pidió la activación de las salas de autogobierno comunal en cada estado, con el fin de coordinar y hacer control y seguimiento del gobierno popular en los territorios. Este es un espacio geoestratégico de la política interna revolucionaria, que articula las ACA con el Plan de las 7T y se conforma por comuna y/o circuitos comunales.
¿Qué son las Salas de Autogobierno?
El vicepresidente sectorial de Planificación, Ricardo Menéndez, en La Guaira, durante un encuentro para la conformación de las comisiones de trabajo vinculadas a las Salas de Autogobierno, detalló que estos espacios tendrán sincronía con los diferentes niveles de gobierno, no solo para proyectos de la Consulta Popular, sino para la solución de otros temas de gestión. De ahí la importancia de que cada gobernador se apropie de dichas salas.
¿Qué quiere decir esto?
En consonancia con el lema «menos escritorios, más territorio», los gobernadores tendrán en cada comuna y/o circuito comunal, una especie de despacho del pueblo, desde donde se orientará la política pública bajo el método de cogobierno, en seis áreas alineadas con las 7T: Economía Productiva, Ciudades Humanas y Servicios, Seguridad y Paz, Ecosocialismo, Ciencia y Tecnología, Organización y Planificación Popular, Suprema Felicidad Social.

En Delta Amacuro, el pasado 4 de junio, el pueblo, al grito de «¡Maduro, amigo, el pueblo está contigo!», acompañó al Mandatario nacional en su segundo estado visitado en el último mes, como parte de los actos de juramentación de sus regentes regionales. Desde allí, a solo metros del Caño Manamo, volvió a recordar a sus nuevos líderes, que deben avanzar en la realización del Plan de la Patria de las 7T en cada entidad, de la mano con las ACA.
En esa ocasión, aprovechó las solicitudes de la gobernadora de Delta Amacuro, Loa Tamaronis, en materia de reactivación de la planta procesadora de palmito, en el municipio Antonio Díaz; así como la reactivación del Complejo Industrial Arrocero Hugo Chávez; y el fortalecimiento y reimpulso de la planta de lácteos y la planta de cacao de la entidad.
Ministros a las comunidades
Ante ello, ordenó la visita a la región del ministro de Industrias y Producción Nacional, Alex Saab; el ministro de Agricultura y Tierras, Julio León Heredia; y el ministro de Pesca y Acuicultura, Juan Carlos Loyo. Por otro lado, pidió a Tamaronis activarse junto a la Corporación Nacional Juntos Todo es Posible, «para ver las instalaciones, la compra de equipos y la preparación del personal, para que Delta Amacuro tenga su unidad de cuidados intensivos pronto, con la mejor tecnología».
Los titulares de las carteras dejaron los escritorios y al día siguiente estaban junto a la gobernadora inspeccionando las plantas y sobrevolando varias trojas de pesca en el municipio Pedernales.
Igualmente, en Aragua, dos días después, recibió a la ministra del Poder Popular para la Salud, Magaly Gutiérrez, para una inspección en las instalaciones del Hospital Central de Maracay (HCM), después de que la gobernadora de la entidad, Joana Sánchez, solicitara el apoyo del Ejecutivo en su rehabilitación integral, respondiendo a las necesidades del pueblo.
Ambas ofrecieron detalles de los trabajos que tienen previstos realizar en el centro de salud y aprovecharon para escuchar a los pacientes. ¿El resultado? Se anunció la dotación inmediata de 20 máquinas de diálisis, la instalación de una nueva junta directiva, la activación de un puesto de gobierno permanente en el HCM, para el control y seguimiento de su funcionamiento, y la creación de un mecanismo para la asignación de insumos directamente a los pacientes.

Impacto inmediato en el pueblo
Desde entonces, las redes sociales de la gobernadora han sido espejo del trabajo articulado con los distintos ministros y autoridades del Gobierno Bolivariano, así como de los avances en el área de diálisis y en la colocación de tuberías para aguas servidas.
«Por fin, alguien que se aboque al sector salud sin miedo», escribió una aragüeña de nombre María Rodríguez, en respuesta a un reel publicado en la cuenta de Instagram de la gobernadora. Sendy Romero. Otro usuario expresó: «Gente que resuelve, respuesta inmediata, acciones que generan cambios. Esto es lo que necesitamos en Aragua».
Hasta los valles del sur de Aragua llegó el despliegue de los ministros, con los titulares de Industrias y Transporte encabezando la jornada, quienes también fueron convocados a otros proyectos en otras regiones. «Excelente, @rvaraguayan @johanitakenpo, Barbacoa se los va a agradecer, gente trabajadora, para que puedan traer su producción al centro del país, para su comercialización por un mejor Aragua», comentó Zhinno George.

Contexto en clave
La estrategia es similar al «Gobierno de Calle» que estableció el Comandante Eterno Hugo Chávez y que consistía en la visita directa de ministros y otras autoridades a diferentes comunidades del país, especialmente a aquellas con más necesidades, con el fin de que escucharan a la gente y ofrecieran soluciones.
No obstante, este se diferencia en que tiene una estructura distinta de funcionamiento y participación local, que permiten la activación de la Contraloría Social y la participación del pueblo, no solo en la escogencia de proyectos o en la formulación de problemas e ideas, sino en la concreción de los mismos. Esto se traduce en un mayor empoderamiento del tejido social.
Esperanza
Este estilo de gobierno descentralizado se consolida como una nueva fórmula que devuelve el protagonismo al Poder Popular, retomando el legado del Comandante Chávez: conectar, movilizar y activar la fuerza del pueblo en todas las coyunturas.
Esta técnica, además, es clave, tomando en cuenta que Venezuela es un país afectado por la imposición de medidas coercitivas unilaterales, que no solo asfixiaron la economía, sino que buscaron fracturar el tejido social, especialmente la capacidad organizativa del pueblo.
En tal sentido, la Revolución Bolivariana promueve la participación ciudadana como una alternativa contra el bloqueo, la injerencia y la coerción externa. Una estrategia que, en su justa medida y con conciencia socialista, podría darle nacimiento al Estado Comunal que soñaba el comandante Chávez para su proyecto gubernamental.
Prensa Presidencial / Iliana Rosales