Estado Miranda.- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, ha enfatizado la importancia de que tanto hombres como mujeres se integren activamente en el Proyecto Patria Grande del Sur. En sus recientes declaraciones, el líder revolucionario destacó que no solo se necesita mano de obra, sino también un enfoque renovado en la educación de la juventud.
«Es fundamental que nuestros jóvenes se dirijan al campo, que reciban formación adecuada y se preparen para producir en la tierra», afirmó. Este llamado a la acción busca empoderar a la nueva generación para que, una vez formados, puedan llevar adelante un modelo productivo al servicio de sus comunidades.
Experiencia del Movimiento Sin Tierra de Brasil
El jefe de Estado invitó a trabajar en conjunto con el Movimiento Sin Tierra (MST) de Brasil, reconocido internacionalmente por su labor en la defensa de la tierra y los derechos de los campesinos.
«Les pido a nuestros compañeros indígenas, campesinos y fuerzas militares, que colaboren con el MST; debemos aprender de su experiencia de cuatro décadas en la lucha por la soberanía alimentaria», propuso el Mandatario. Esta colaboración representaría un paso clave hacia el fortalecimiento de la agricultura en Venezuela, promoviendo un modelo más sostenible y autóctono.
El conuco como esencia de nuestra agricultura
El presidente Maduro enfatizó la necesidad de rescatar el concepto de «conuco», una práctica agrícola ancestral de los pueblos originarios.
«El conuco es la esencia del movimiento campesino e indígena venezolano a lo largo de milenios. Cuidar la tierra para que siempre produzca es nuestra responsabilidad», señaló. Este concepto, según Maduro, no solo debe ser revitalizado, sino también escalado y adaptado a nuestras realidades, promoviendo una agricultura agroecológica que no sea invasiva ni contaminante.
Rompiendo con los paradigmas del pasado
«Queremos romper con los viejos paradigmas impuestos desde Occidente, que se niegan a morir», afirmó el Presidente. Este mensaje busca inspirar un nuevo entendimiento y respeto hacia la agricultura local y sus métodos, invitando a la sociedad venezolana a forjar su propio camino hacia el desarrollo sostenible.
«Que nazca nuestro concepto, que nazca el concepto del conuco de escala», concluyó el Presidente, reafirmando su compromiso con una revolución agraria basada en los principios de la justicia social y la solidaridad.
Este proceso, guiado por la sabiduría de los pueblos originarios y el trabajo en conjunto con organizaciones como el MST, puede abrir nuevas posibilidades para una Venezuela libre y soberana, donde la tierra y su producción sean patrimonio de todos.