Palacio de Miraflores, Caracas.- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, resaltó durante su programa habitual, Con Maduro Live De Repente, que una vez más, la voz del pueblo se transforma en fuerza para avanzar en la construcción de la Venezuela del futuro.
Asimismo, ha manifestado con relación a la Gran Campaña electoral que se realizó previo a las elecciones del 25 de mayo, que esta ha sido una acción que convirtió la palabra del pueblo en un plan de acción; motivo por el cual, expresó: «Estuvimos en el fragor y la alegría compartida con el pueblo que estuvo hoy en el cierre de campaña en Caracas».
Por su parte, la primera dama de la República, Cilia Flores, subrayó la organización del pueblo venezolano, porque mantienen estructuras sólidas y trabajando de manera consecutiva en sus proyectos.
Además, la primera dama de la República aseveró que esto se convierte en una conciencia clara del papel histórico de los venezolanos y de la relevancia que tiene el hecho de ejercer el derecho al sufragio.
En la misma línea, la candidata a la gobernación del estado Aragua, Joana Sánchez, enfatizó que tenemos que «seguir honrando el legado del comandante Chávez y del presidente Nicolás Maduro, por el contenido histórico en el transcurrir de la Revolución Bolivariana».
Aunado a ello, destacó que el campo de batalla son los centros electorales que son los puntos en donde se define, a través del voto, con un proceso impecable y rápido, el futuro de la Patria.
En el mismo orden de ideas, es de interés mencionar que, mediante el desarrollo del programa, el jefe de Estado realizó el simulacro de votación de lo que será el proceso de sufragio el próximo 25 de mayo.
En este proceso estuvo acompañado por la primera dama, Cilia Flores; el ministro del Poder Popular para las Comunas, Movimientos Sociales y Agricultura Urbana, Ángel prado; el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez; la candidata a la Gobernación del estado Aragua, Joana Sánchez, entre otras autoridades.
Prensa Presidencial/ Irmary Díaz