Palacio de Miraflores, Caracas.- El 25 de julio de 1999, desde el Balcón del Pueblo en el Palacio de Miraflores, el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez Frías, pronunció un discurso que marcó un hito en la historia política de Venezuela y que dio nacimiento a lo que conocemos hoy como soberanía popular.
Tras una victoria arrolladora del Polo Patriótico en las elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), el mensaje del Comandante de la Revolución Bolivariana resonó con su profundo énfasis en la soberanía popular y la promesa de una transformación del Estado venezolano.
Este análisis busca destacar los aspectos positivos de aquel discurso, su contexto y la trascendencia de su mensaje central. Al final de este trabajo, podrás descargar el discurso completo realizado por el Comandante Eterno.
El impulso de un cambio profundo
El discurso del máximo líder de la Revolución Bolivariana se enmarca en un momento de efervescencia política y social en Venezuela. Las elecciones del 25 de julio de 1999 no fueron unas votaciones más, representaron la culminación de una de las principales promesas de la campaña electoral: convocar a una Asamblea Nacional Constituyente para refundar la República.
«Hemos elegido la Asamblea Nacional Constituyente que dará nacimiento a la V República»
Comandante Eterno Hugo Chávez
La alta participación del 50% y la victoria abrumadora del Polo Patriótico (con el 96% de los escaños) legitimaron el proceso y otorgaron un respaldo popular al proyecto del Socialismo del siglo XXI.
Venezuela venía de décadas de un sistema político bipartidista (el Pacto de Punto Fijo) que había generado desencanto, corrupción y exclusión social. La figura del comandante Chávez emergente en 1992, canalizó el descontento popular y ofreció la Constituyente como la vía para desmantelar las estructuras políticas existentes y construir una «V República». El discurso, por tanto, se dio en un clima de esperanza para sus seguidores y de incertidumbre para la oposición.

La soberanía reside en el Pueblo
El corazón del discurso del Comandante Eterno tenía como epicentro una idea poderosa: la soberanía popular. Desde el inicio, Chávez exalta al pueblo venezolano como el protagonista y el artífice de la victoria. Frases como «¡Qué grandeza la del pueblo de Simón Bolívar, qué grandeza la del pueblo venezolano, qué grandeza la de ustedes!» o «Hoy es un día de grandeza, se acaba de cumplir una jornada más para la historia gloriosa del pueblo venezolano», subrayan esta centralidad.
Asimismo, deja claro que la ANC posee un carácter «soberanísimo» y «originario», emanado directamente de la voluntad popular, por lo tanto, puso su cargo a la orden de esta asamblea, lo que refuerza la idea de que la Constituyente estaba por encima de los poderes constituidos. En tal sentido, el poder constituyente originario pasa a conformar la piedra angular de su propuesta de Revolución.
«Yo ratifico ante Venezuela que mi cargo de Presidente de la República y no lo estoy diciendo ahora después de la victoria… anoche yo puse a disposición de la Asamblea Constituyente mi cargo de Presidente de Venezuela, para que ellos decidan si yo debo continuar gobernando al país o no debo hacerlo»
Comandante Eterno Hugo Chávez

Un discurso de consolidación y convocatoria
El comandante Chávez emplea una serie de argumentos y recursos que consolidan la victoria y proyectar su visión:
- Legitimidad electoral: Presenta los resultados con un entusiasmo contagioso, detallando la victoria del Polo Patriótico en cada estado. La cifra del 96% de los escaños para el Polo Patriótico es evidencia irrefutable de la voluntad popular, que otorga una «legitimidad absoluta» y una «legalidad impresionante» a la Constituyente.
- Conexión con Bolívar: La figura del Libertador Simón Bolívar es invocada constantemente, no solo como un referente histórico, sino como un guía ideológico. Al decir «nosotros somos bolivarianos hasta la médula de los huesos y Bolívar anda de nuevo con nosotros, conduciendo su revolución pacífica, democrática, hermosa y popular»; el líder de la Revolución vincula la victoria y el proceso constituyente con las raíces fundacionales de la nación y con los ideales del Libertador, otorgándole un sentido de continuidad histórica.
- Llamado a la humildad y respeto: A pesar de la victoria avasalladora, el Comandante Chávez hace un llamado a la humildad y al respeto por el vencido, citando el Oráculo del Guerrero: «Cuando obtengas una victoria, envaina tu espada y retírate en silencio. No hay nada que festejar, no abuses de tu victoria, no humilles a tu enemigo porque mañana viene otra batalla». Con ello, proyecta un proceso inclusivo, a pesar de la polarización que ya se vislumbraba.
- Promesa de transformación: El discurso es un adelanto de los cambios estructurales que se avecinan. Habla de la «V República» que nacerá con la nueva Constitución, el reordenamiento de los poderes públicos y la creación de un Poder Moral y un Poder Electoral, ideas que atribuye a Bolívar. La introducción del referéndum revocatorio para gobernadores y alcaldes es presentada como una genuina expresión de democracia directa, que contrasta con el «mamotreto» del Punto Fijo.
- Tono emotivo y convocante: El comandante Chávez es directo, apasionado y personal. Utiliza interjecciones, se dirige directamente al pueblo (ustedes) y comparte sus sentimientos (cada día amo más al pueblo venezolano). Esto crea una conexión emocional con la audiencia, reforzando la idea de una causa compartida y un liderazgo cercano. El cierre con la frase de Bolívar: «Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando convoca la soberanía nacional para que ejerza su voluntad absoluta»; sella el mensaje de empoderamiento popular.
«Hoy 25 de julio ya tenemos Constituyente. Ya tenemos Constituyente y yo felicito al pueblo de Venezuela por haber sido capaz de darse una soberanísima Asamblea Constituyente»
Comandante Eterno Hugo Chávez
Sentando las Bases de un Nuevo Orden
El discurso tuvo un impacto político y social inmediato y a largo plazo. En lo inmediato, consolidó la figura del presidente Chávez como el líder indiscutible de un movimiento que buscaba transformar Venezuela desde sus cimientos.
La victoria y el discurso sirvieron para galvanizar a sus seguidores y para mostrar a la oposición la magnitud del cambio que se avecinaba.
Socialmente, el mensaje reforzó la idea de que el pueblo, a través de la Constituyente, tenía el poder de redefinir su destino. Esto generó un sentido de representación y participación en amplios sectores de la población, que se sentían marginados del sistema político tradicional. La promesa de una «Patria digna, una Patria hermosa» para las futuras generaciones, resonó con las aspiraciones de cambio.



Conexión con la actual Constitución Bolivariana
Una de las mayores conexiones del discurso con la actual Constitución Bolivariana es la articulación explícita de los pilares que la sustentarían. Chávez no solo anuncia la creación de la «V República», sino que adelanta propuestas concretas que luego serían incorporadas en la Carta Magna:
- Carácter Bolivariano: La propuesta de declarar a Venezuela una «República Bolivariana, irrevocablemente libre e independiente, soberana» fue plasmada en el Artículo 1 de la Constitución.
- 5 Poderes Públicos: La idea de crear un Poder Moral (posteriormente denominado Poder Ciudadano) y un Poder Electoral se materializó en la Constitución, llevando la estructura tradicional de tres poderes (Ejecutivo, Legislativo, Judicial) a cinco, un elemento distintivo de la Revolución Bolivariana.
- Mecanismos de Democracia Participativa: El referéndum revocatorio, la base de la «democracia verdadera» según Chávez, fue consagrado en el Artículo 72 de la Constitución, permitiendo la remoción de cargos de elección popular. Esto reflejaba la insistencia de Chávez en que la soberanía no solo se ejerce en las elecciones, sino de forma continua.
- Énfasis en la Soberanía Popular: El Artículo 5 de la Constitución establece explícitamente: «La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce directamente en la forma prevista en esta Constitución y en la ley, e indirectamente, mediante el sufragio, por los órganos que ejercen el Poder Público».



«Lo primero que le voy a pedir a la Asamblea Constituyente es que en la primera parte de la nueva Constitución… declare a Venezuela una República Bolivariana, irrevocablemente libre e independiente, soberana como tiene que ser la República Bolivariana que está naciendo»
Comandante Eterno Hugo Chávez
En resumen, el discurso del Comandante Eterno, el día 25 de julio de 1999, no fue solo una celebración de la victoria electoral; fue una declaración de intenciones y una hoja de ruta para la profunda transformación política y jurídica que estaba a punto de ocurrir en Venezuela.
En este sentido, subrayó la soberanía popular como motor del cambio y sentó las bases ideológicas y programáticas de la Constitución Bolivariana que nacería meses después.
Prensa Presidencial / Iliana Rosales