Palacio de Miraflores, Caracas.- Durante su participación la séptima emisión del podcast del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez destacó el significado que tuvo en su vida el Comandante Hugo Chávez, durante la rebelión del 4 de febrero de 1992.
“Fue un impacto para Venezuela, yo venía del año 88 con las elecciones: el Gocho para el 88. Recuerdo cuando anuncia que quien ganó había sido Carlos Andrés Pérez. Imagínate me encerré en el baño a llorar y dije: que me iba de Venezuela (…) que yo no puedo soportar que sea el punto fijismo quien siga privando a la juventud de sus derechos en el país y Chávez trajo la esperanza, fue una luz para Venezuela. No es una proclama, Chávez de verdad significó la esperanza para nuestro país”, afirmó.
Recordó que antes de la llegada al poder del Comandante Chávez, se trazó la estrategia de privatización de casas de estudio públicas, que cercenó los sueños de miles de estudiantes universitarios en el país.
“Vino una estrategia de las élites de privatizar la Universidad Central y las –universidades- públicas a través de la vía de las pruebas internas de admisión que tenían un criterio socioeconómico, y de tal manera cerrar la posibilidad a los más pobres de ir a las universidades públicas, eso cambió con el Comandante Chávez”, dijo Rodríguez.
El Jefe de Estado aportó en este punto, que se trató de algo más que solo una política de privatización de las universidades.
“Una política de privatización y elitización de las universidades nacionales públicas, sostenidas por el presupuesto de la nación, pero las fueron privatizando, creando alcabalas para que los estudiantes, sobre todo de los sectores populares, nunca llegaran a la Universidad Central (…) Que las élites del país fueran las que llegaran a las universidades nacionales, que eran las universidades de gran prestigio”, apuntó.
Durante la conversación, Rodríguez también rememoró sus estudios en la Facultad de Derecho de la Universidad Central de Venezuela en 1987.
“Tomé una decisión de hacer justicia con el caso de mi papá. Y entré a la escuela de derecho, a la facultad, allí inmediatamente apliqué para ser auxiliar de investigación en el Instituto de Estudios Penales”.
Más tarde, decide cambiar a derecho laboral y culmina su carrera en el año de 1992, en esta fecha junto a dos compañeros más escogen llamar a su promoción “Hugo Chávez Frías”.
La funcionaria aprovechó la oportunidad para señalar que con ella cursó estudios uno de los miembros opositores, impulsores de la violencia en Venezuela, Carlos Vecchio, quien “¡Naguará¡ ¡Pésimo estudiante! Ni siquiera sé cómo se graduó porque siempre iba raspado”, señaló.
Viviendo en el extranjero
En 1993 la actual Vicepresidenta decide irse a París, Francia, para cursar estudios en derecho laboral y sindical, “porque Francia y Bélgica tenían unos regímenes muy particulares en el derecho sindical, era realmente muy completo todo el sistema de representatividad sindical y yo siempre le decía a quienes hoy todavía militan en la oposición, pero que estudiaban y coincidimos en Francia en esa época, les decía que en Venezuela iba a venir una revolución”.
Relató que nunca se adaptó a la vida en París porque la dinámica que hacian los migrantes era muy negativa y compleja.
“Fue muy duro, porque el parisino es muy difícil, es una persona no agradable desde el punto de vista humano y –hay- mucho rechazo a los migrantes (…) en el metro quemaban, por ejemplo, a los árabes vivos. Era un sistema realmente terrible. Muy excluyente y muy xenófobo”, explicó.
Al respecto, el Mandatario nacional enfatizó que es lamentable y preocupante la creciente xenofobia que se vive en Europa y los Estados Unidos “contra los latinoamericanos, los africanos, los árabes, contra el pueblo musulmán, nuestros hermanos musulmanes”.
Añadió el Dignatario que actualmente se dice que existen dos Francias, “la Francia de la migración, es una Francia casi mayoritaria, y la otra Francia que es la Francia blanca, si se puede llamar así, que es una Francia llena de contradicciones, entre un progresismo que quiere adaptarse a los nuevos tiempos y una corriente xenófoba de ultra derecha que quiere un modelo que ya llevó a Europa a varias guerras en los siglos pasados”, concluyó.
Prensa Presidencial / María Mercedes Noguera