• Lun. Dic 16th, 2024

Nicaragua y la vigencia del legado del Comandante Chávez en la lucha antiimperialista

porPrensa Presidencial

Dic 15, 2024

Centro de Convenciones Simón Bolívar, La Carlota. – En la reciente XXIV Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana de los Pueblos de América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, hizo un llamado a la unidad y a la resistencia frente a las agresiones imperialistas que persisten en América Latina.

En un momento crucial para la región, Ortega subrayó el papel esencial del presidente Nicolás Maduro en la defensa del legado del Comandante Hugo Chávez, cuyo pensamiento revolucionario sigue siendo un faro de esperanza para los pueblos en la lucha por su autodeterminación.

El mandatario nicaragüense destacó la inquebrantable lealtad del pueblo venezolano a sus líderes, incluso en medio de las adversidades provocadas por la agresión externa.

Afirmó que, «a pesar de los ataques, el pueblo se mantiene firme y resiste, demostrando que el legado de Chávez sigue vivo y en acción».

En su intervención, Ortega denunció la interferencia de lo que denomina el imperio, advirtiendo que este poder hegemónico busca continuamente desestabilizar los procesos de liberación en América Latina, intentando ahogar en sangre y calumnias cada expresión de soberanía.

Logros en la emancipación de la región

Ortega situó al Comandante Chávez como un revolucionario cuyo legado se hace presente en la conciencia de los pueblos, en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y en el propio ALBA.

El presidente nicaragüense comparó la creación de esta Alianza hace 20 años con un acontecimiento espiritual y transformador, subrayando que «la creación del ALBA fue un acto de resistencia y de esperanza para nuestra América».

En este contexto, el líder sandinista enfatizó que, «hoy, después de 20 años, nuestra convicción se mantiene intacta y estamos más comprometidos que nunca con la lucha por la justicia social y la integración».

20 años del ALBA-TCP

La cumbre se convirtió en un escenario para proclamar que, «en medio de un mundo donde los imperialistas continúan atacando a nuestros pueblos, el ALBA, con la bandera de Fidel y Chávez, se erige como un estandarte de lucha y resistencia».

Con un firme compromiso de no rendirse, Ortega convocó a los países miembros a avanzar y a incorporar nuevas iniciativas que fortalezcan la solidaridad y la cooperación entre las naciones.

La cumbre del ALBA reafirmó su misión de promover la justicia social y la cooperación, pilares imprescindibles en un contexto global que sigue siendo adverso.

Desde su fundación en 2004 por Fidel Castro y Hugo Chávez, Nicaragua, junto al Estado Plurinacional de Bolivia, ha estado entre los defensores más ardientes de esta alianza, que se erige como un bastión contra la opresión y una plataforma para fortalecer la unidad y la emancipación de los pueblos de América Latina.

Prensa Presidencial / Luis Tavera