San Petersburgo, Federación de Rusia.- Este sábado, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, participó en el tradicional cañonazo de la Fortaleza de San Pedro y San Pablo, que comienza en el siglo XVIII, en 1703, año en el que Pedro El Grande ordenó disparar un cañón cada día desde este lugar para anunciar el comienzo y el final del trabajo, y también la hora de la cena para los trabajadores.
El 23 de junio de 1957, el cañón se volvió a disparar a mediodía desde la Fortaleza de San Pedro y San Pablo, y se ha disparado todos los días desde entonces. Además, se invita a los invitados de honor extranjeros a participar en el disparo ceremonial del cañón.
Pedro el Grande, fue un líder visionario que modernizó Rusia, que al comienzo de su mandato se encontraba muy a la zaga de los países occidentales y la transformó en una gran potencia. Gracias a sus numerosas reformas, Rusia logró avances extraordinarios en el desarrollo de su economía, comercio, educación, ciencia, cultura y política exterior.
Toda la política de Pedro El Grande estuvo dirigida a convertir a Rusia en una potencia dominante en Europa.

El jefe de Estado estuvo acompañado por Alexander Beglov, gobernador de San Petersburgo; Sergei Melik-Bagdasarov, embajador de Rusia en Venezuela; Mvgueniy Grigóriev, presidente del Comité para Relaciones Exteriores de San Petersburgo; también del M/G. Jesús Salazar, embajador de Venezuela en Rusia; G/D Edward Vergel Tortolero, agregado militar de Venezuela en Rusia; y Andrés González, primer secretario de la Embajada de Venezuela en Rusia.
Prensa Presidencial/Irmary Díaz.