Caracas, Venezuela.- El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, aseveró durante un rueda de prensa frente medios internacionales, que el Gobierno de Venezuela siempre tendrá todos los canales de conversación, de diálogo y diplomáticos abiertos con los Estados Unidos, aunque estos momentos se encuentren «malogrados», por los incesantes ataques que mantienen contra Venezuela.
En este orden de ideas, el Jefe de Estado advirtió que a pesar que «están maltrechos» los dos canales de comunicación que existen entre ambos países, le sugiere cuidarse al presidente Donald Trump, porque «Marco Rubio quiere manchar sus manos de sangre, con sangre suramericana, caribeña, con sangre venezolana (…) y que su apellido se manche de sangre por los siglos de los siglos, con una masacre contra el pueblo de Venezuela, con una guerra terrible contra Suramérica y el Caribe, porque esta sería una guerra completa en todo el continente».
Lo antes escrito, fue enfatizado por el Líder venezolano ya que el imperio quiere retomar la «diplomacia de las cañoneras», que solo buscar dominar haciendo valer solo sus términos y condiciones; y motivo por el cual, aseguró que con Venezuela esto no ocurrirá, porque esta es una opción errática y equivocada.
Al mismo tiempo, el Dignatario venezolano ha mencionado que entre las vías de diálogo «malogrados» que se tiene con los Estados Unidos (EE.UU.), está el que se estableció con el señor John McNamara que visitó el país cuando el Gobierno revolucionario logró el intercambio de los 252 venezolanos secuestrados en los campos de concentración de Nayib Bukele, a cambio de diez terroristas que intentaron crear caos en Venezuela.
Asimismo, agregó que el otro puente de comunicación con el gobierno de los EE.UU. es con Richard Grenell, el enviado especial que recibió el 31 de enero del presente año, también de manera deferente en el Palacio de Miraflores, con el objetivo de establecer una Diplomacia de Paz, que ha sido quebrantada.
En este contexto, es importante destacar que el Presidente reiteró que Venezuela es un país con dignidad, conciencia, valores y que siempre hará valer sus derechos, bajo los términos del respeto mutuo.
Palacio de Miraflores/ Irmary Díaz