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Azerbaiyán, una potencia energética emergente

porPrensa Presidencial

Jun 16, 2022

Bakú, Azerbaiyán.- La República de Azerbaiyán es un país de la región euroasiática. Sin salida a ningún océano, limita al este con el mar Caspio, al norte con Rusia, al noroeste con Georgia, al oeste con Armenia y al sur con Irán.Con más de 10 millones 130 habitantes, se ubica en la posición 91 de la tabla de población, compuesta por 196 países y tiene una densidad de población de 117 habitantes por Km2.

Su capital es Bakú y su moneda Manat azeríes. Bakú, se erige como centro comercial de Azerbaiyán. Es famosa por su centro antiguo, medieval y amurallado, donde se encuentra el Palacio de los Shirvanshahs, un gran complejo real, además de la icónica torre de piedra Maiden.

La ciudad fue uno de los mayores centros petroleros de la antigua Unión Soviética y actualmente es el centro científico, cultural e industrial de Azerbaiyán.

La economía de Azerbaiyán sigue dependiendo del sector de los hidrocarburos que representa el 87% de las exportaciones, contribuye a la mitad de los ingresos y aporta el 38% del PIB. No obstante, el Gobierno ha adoptado diferentes medidas de estímulo y de liberalización destinadas a la diversificación de la economía.

Después de la recesión de 2016-2017, el crecimiento del PIB en términos reales comenzó a recuperarse hasta que en 2020 la economía empezó a decrecer como consecuencia de la pandemia y del descenso de los precios del petróleo. Sin embargo, los datos de 2021 reflejan que éste ha sido un año de crecimiento del PIB del 2,3% y las estimaciones apuntan a que esta recuperación continuará en 2022.

Colorido acervo cultural

La cultura de Azerbaiyán seduce a los viajeros con su historia milenaria, ahora expresada a través de flagrantes colores y un apasionado despliegue de sentimientos. A medida que las tradiciones nómades de las tribus guerreras túrquicas se fundían con el estilo de vida sedentario de los persas y la ideología árabe-islámica, nacían tradiciones únicas en el cruce de caminos de Eurasia, ahora conocido como Azerbaiyán. Aunque siempre ha mantenido su identidad musulmana en el Cáucaso, una región dominada por la religión ortodoxa, aquellos viajeros atentos reconocerán en el país la influencia rusa y europea.

La cultura de Azerbaiyán se palpa en las animadas danzas simbólicas, las delicadas pinturas en miniatura, las exquisitas alfombras tejidas a mano y las avanzadas producciones teatrales y cinematográficas. Historia y leyenda se mezclan en coloridas historias épicas, mientras que los visibles recordatorios del pasado pueden ser vistos en los palacios medievales azerbaiyanos y las resistentes estructuras soviéticas, mezcladas con modernos rascacielos que establecen récords.

Las tradiciones y costumbres de Azerbaiyán tienen una larga historia. A través de los años las tradiciones han evolucionado, pero se han conservado hasta el día de hoy. Algunos de esos difieren dependiendo de la región del país.

Una gastronomía milenaria

La gastronomía de Azerbaiyán se basa en la experiencia hereditaria de los maravillosos chefs que aún permanecen. Es original y tiene un carácter nacional, el cual manifiesta las técnicas de cocina y tradiciones de esta nación.

La cocina azerbaiyana está entre las más diversas y las más saludables, y cuenta con una gran abundancia de diferentes tipos de carne, pescado y verduras complementadas con gustosas especias. Los platos tradicionales de la cocina azerbaiyana son originales y únicos.Algunos platos exclusivos son dolma, bozbash, bozartma, chikhirtma, khashil, piti, pilau govurma. Prueba los exquisitos platos de la cocina azerbaiyana, además de sus vinos exquisitos.

El té

El té tiene gran importancia para los azerbaiyanos; el vaso nacional de té es “armudu” que se parece a la forma de una pera. Con el té comienzan las fiestas familiares y también se terminan. Usualmente al té se le añaden algunos especias como jengibre, acetillo, menta, tomillo, cardamomo, etc.

Las fiestas

El Ramadan, la celebración del sacrificio y el novrux son tres de sus principales festividades.El primero de ellos, es un período especial para los musulmanes practicantes alrededor del mundo, caracterizado por la disciplina espiritual y la búsqueda de la purificación.

La celebración del sacrificio se celebra 70 días después de la fiesta de Ramadán, en conmemoración del pasaje recogido en el Corán, en el que se muestra la voluntad de Ibrahim de sacrificar a su hijo como un acto de obediencia a Alá, antes de que Alá interviniera para proporcionarle un cordero y que sacrificara a este animal en su lugar.

En este día, las personas que ganen dinero y que no tengan deudas sacrifican una oveja, camello o una vaca y distribuyen a todas las personas pobres que conoce.

Por último, el novruz es una fiesta que se celebra con el motivo de la llegada de la primavera. Desde antiguos tiempos se preparan especialmente a esta fiesta: se limpia la casa y hacen provisiones de fiesta especial.

Se encienden las hogueras antes de Novruz, el último miércoles cada uno debe saltar sobre la hoguera siete veces, al tiempo que dicen: “Mi amarillez a ti, tu rubor a mí, que se queman mis pesos y penas en este fuego”. No se puede apagar la hoguera con agua.

Prensa Presidencial / Karla Cotoret